sábado, diciembre 6

Muertos

Sombras a medianoche, la luna tras negras nubes se esconde de pena al vernos pasar tan desolados, tan insolentes, tan idiotizados. El ambiente está hediondo de vida a pesar de la muerte que cubre el pavimento de la avenida, que ronda en una esquina oscura, que todos cargamos con nuestra indiferencia… ¡qué falso es ese olor!, tan aparente como nuestra propia cara, como nuestras acciones, como nuestro pensamiento, como nuestra fingida sonrisa al porvenir. Un perro ciego parece tener más dignidad que nosotros, más fuerza para con la vida, que deprimente se ha vuelto nuestro raciocinio. Nos justificamos viviendo entre sueños fantásticos, nadando en mares de alcohol, en nubes de yerbas sanatorias o en viajes espaciales pagados por la receta de un doctor. ¿No es ya hora de que pisemos firme en la tierra?, tal vez estoy pecando de inocente, con una cerveza en la mano izquierda.
Que detestable se ha vuelto cohabitar el mundo, a pesar de ser todos uno. Así ¿Odiarme? ¿Podría acaso hacerlo?... Podría, sin embargo mientras respire me conformare con odiar a los demás muertos.

¡Qué falso es ese olor!





2 comentarios:

Anónimo dijo...

tu merol... me agrada

Anónimo dijo...

changos se oye raro eso de tu merol me agrada xD bueno me agrada lo que escribiste.


undocip:::